Casa de la Música de Trinidad
la casona
La Casa de la Música de Trinidad es un establecimiento perteneciente a la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM).
Ocupa una amplia casona de estilo colonial cubano, bella por si misma, que fue inicialmente construida en el año 1700, sufriendo después ampliaciones y modificaciones hasta que la adquirió Guillermo Fisher, ingeniero trinitario de indudable familia de origen alemán, que ocupó distintos cargos públicos relacionados con su profesión, y que a través de la historia trinitaria también se recuerda, porque poseyó los naranjales más famosos y productivos de la ciudad.
En 1995 la EGREM comenzó la reparación total de la vivienda, se remozó y adaptó para inaugurar un año después la “Casa de la Música” de Trinidad.
escalinata
Por las noches funciona su inigualable anfiteatro donde se encuentra la mejor discoteca y el mejor salón de baile del centro del país. Allí se presenta excelentes grupos musicales y el baile dura hasta avanzada la madrugada. La música que se escucha está interpretada por los grupos «Estrellas de Trinidad», un desprendimiento de la orquesta «Estrellas del 48», y por «Los Lamas», una excelente agrupación que interpreta como nadie el son y la música campesina. Su director es un extraordinario laudista y guitarrista trinitario.
Es la sede, desde hace mucho tiempo, del sexteto «La Parranda» de Perico Téllez, muy conocido por la interpretación de del son trinitario. No obstante, se podrá escuchar otros grupos musicales que interpretan el son y otros géneros de acuerdo con le gusto de los clientes. En el lugar no falta tampoco la música romántica cuando los tríos guitarrísticos ocupan su espacio.
En su larga y amplia escalinata, situada a la entrada de la casona se encuentra su acogedor bar, y los visitantes pueden presenciar desde allí, el original espectáculo de la costa trinitaria: la inserción de la península del Ancón, toda la playa de María Aguilar, el Puerto de Casilda, La desembocadura del Guaurabo; famoso porque fue visitado por el descubridor Cristóbal Colón, el conquistador Diego Velásquez, el conquistador Hernán Cortés y el segundo descubridor de América, Alejandro Humboldt.
Sentado en esta misma escalinata, se domina también una buena vista panorámica de la ciudad, mientras se escucha música trinitaria, interpretada por excelentes grupos soneros de la región, los que mantienen viva la tradición musical que caracteriza a esta cultural ciudad.
Salones
En unos de los salones de la casona se puede presenciar la exposición permanente que se exhibe, sobre los grandes músicos trinitarios y otros artistas de la plástica, así como la tienda más completa que existe en la ciudad y en la provincia acerca de la música cubana. En ella se puede adquirir todos los discos que produce la EGREM y jamás faltan los instrumentos necesarios para los formatos de las orquestas que hacen música popular.
Patio
En su amplio patio, de singular belleza, adornado con pérgolas y enredaderas frondosas, frutales y flores, existen salones tanto para escuchar música, como para celebrar bodas, cumpleaños, banquetes y otras actividades.
Es muy común encontrarse una jovencita fotografiándose por sus 15 años o una pareja de recien casados registrando su inolvidable día de matrimonio.
Restaurante
En su restaurante, llamado “La Parrillada” , se puede saborear los más exquisitos platos criollos y como “Casa de la Música” al fin, siempre amenizado con singular y agradable música, muy apropiada para cada ocasión.
Servicios
DJ
Disfrute con nuestros DJ de la mejor música de la actualidad.
Show
Show y espectáculos en vivo con cantantes y bailarines profesionales.
Conciertos
Presentación de artistas de fama nacional en conciertos únicos.
Coctelería
Servicio especializado de bebidas alcohólicas y coctelería.